El único e incomparable Bob.

Katherine Applegate | Gran Travesía | 356 págs | 15.15€ | El único e incomparable Iván #2 | Inglés | Comprar aquí

El único e incomparable Bob continúa la historia de El único e incomparable Iván, con Bob, el simpático perro callejero que conquistó nuestros corazones, convertido ahora en el héroe de esta historia maravillosa y llena de peligros. Bob, un perro rebelde pero de gran corazón, deberá enfrentarse a sus peores temores y emprender un peligroso viaje para recuperar a su hermana perdida. Con la amenaza de un inminente huracán, Bob habrá de apoyarse en sus mejores amigos, Iván y Ruby, hallar el coraje que nunca supo que tenía y aprender para siempre el verdadero significado de la amistad y la familia.

Si sois seguidores del blog, sabréis que conozco a Katherine Applegate desde que sacó su novela «El único e incomparable Iván», la historia de un precioso gorila encerrado en un zoológico que ansía la libertad. Bob era uno de los personajes secundarios, un perro salvaje que nunca había tenido dueño y que me parecía un personaje de lo más entretenido. Fue por eso por lo que no dudé en darle una oportunidad a su historia.

'Cuando perdonas, pierdes tu enfado y cuando pierdes tu enfado, te debilitas. Y cuando estás débil, puedes volver a lastimarte'.

Voy a empezar comentando la trama de la novela. Y es que, a diferencia de la primera parte, esta es un completo desastre. Y hablo de desastre no en el sentido de que esté mal estructurada, sino que simplemente no tenemos una línea temporal donde, de manera sucesiva, se de un orden de hechos, sino que más bien es un libro centrado a contar las anécdotas de un perro que no dejan de ser aburridas y monótonas, porque un perro no es que tenga tampoco una vida muy entretenida. No hay giros en la trama, cosa que no considero estrictamente necesaria, y los datos de ambientación son nulos. Se me queda un mal sabor de boca, porque la historia de Iván me encantó, pero creo que fue por el conjunto de unos personajes reales unidos a una historia bastante cruda y real que tenía detrás un trasfondo verdaderamente bonito, cosa que he echado de menos aquí. De nuevo, el narrador será un animal, siendo, en este caso, un perrete sin raza y callejero que me ha gustado mucho, pero con el que tampoco he logrado conectar, cosa que me ha dado mucha pena porque, teniendo en cuenta que es un animal doméstico y tenemos más contacto con él que con otros animales de la novela, consideraba que iba a ser más fácil.

Prosigo la reseña hablando de los personajes puesto que, a decir verdad, y como ya he adelantado, no he conectado con ellos en ningún momento. Hay algunos personajes del primer libro que también salen, pero no he sentido que sean los mismos, parecían ser más superficiales y menos trabajados. Claro está, tengo en cuenta que son personajes secundarios, pero es que ni la personalidad tan bonita que tenían en la primera entrega se mantiene en la segunda. Podría hablar de que hay una evolución en los personajes y es por eso el cambio, pero no lo he sentido así. 

En lo referente a la estructura de la novela, tendremos una serie de capítulos cortos sin numerar, por lo que no os puedo decir la extensión que tiene cada uno, pero no se alargan más de dos carillas, puesto que al público al que va dirigido es a niños de más de nueve años y considero que debe hacerse un ritmo ameno para ellos. A mí la verdad es que es lo que más me ha gustado del libro, obviando que no encuentro una estructura lógica en una relación con una línea temporal.

'La forma en que entiendo las cosas es así. Vivimos en una bola solitaria llamada Tierra, y los humanos básicamente la han estado arrojando contra la pared durante tanto tiempo que la pobre bola se está cayendo a pedazos'.

Ya conocía la pluma de la autora. Siendo completamente sincera, tanto conmigo misma como con vosotros, para mí han sido libros que parecen estar escritos por personas diferentes. Mientras que en la historia de Iván tenemos una historia dulce, pausada y llena de momentos momentos, aquí no tenemos más que la reflexión de un perro callejero que tampoco aporta mucho ni tampoco hace tocar nuestro corazón. Mentiría si dijese que ha habido capítulos que me han gustado, pero no han superado los que no. Las descripciones en este libro serán más breves y los personajes tampoco están detallados como al principio. Si es por algo por lo que le pongo las tres tacitas es porque, realmente, creo que es una historia que puede ser bonita, con un personaje muy gracioso y entrañable, pero que el fallo lo tengo yo porque la estructura del libro no es la que más me gusta. Ya me ha pasado con otros libros superventas que, con la misma estructura, no me ha gustado y este ha sido uno más. No sé si le daré una nueva oportunidad en el futuro al libro, porque tengo muchos pendientes y prefiero darle prioridad a los que aún no he leído.

En conclusión, «El único e incomparable Bob», es una historia que se aleja, en bastantes sentidos, de su primera parte. Con un protagonista entrañable y lleno de vitalidad conoceremos la vida de Bob, desde el punto de vista de un perrito callejero que no tiene familia. Me hubiese gustado conocer más a los personajes y conectar con la trama, pero si te llama la atención, no dudes en darle una oportunidad entre lecturas más densas; es la mejor opción de este tipo de novelas middle-grade.