Reseña | El príncipe y la modista ~ Destellos.

Seguro que no soy la única que ha visto «El príncipe y la modista» por bookstagram cientos de veces, así que, cuando me suscribí a Nexstory una plataforma anteriormente conocida como Nubico, me animé a leerla porque estaba disponible. En cuanto me lo terminé y vi cuánto me había gustado la pluma de la autora, me lancé a leer «Destellos». 

 

Ambas historias me han parecido preciosas, pero Destellos se va directo a una de mis mejores lecturas del año, porque ha sido entrañable. Son dos novelitas gráficas que puedes leer entre lecturas, cuando no tengas mucho tiempo para dedicarle a los libros o cuando te apetezca leer algo más rápido y sencillo que una novela compleja.

Hago esta reseña conjunta porque los he leído seguido y son de la misma autora. Por lo que hay bastantes aspectos que comparten, pero AMBAS NOVELAS SON AUTOCONCLUSIVAS. No tiene nada que ver una trama con la otra; personajes diferentes, ambientación diferente, tramas diferentes... ¡Todo es diferente, excepto su autora!

'Toda mi vida consiste en que otras personas decidan qué es aceptable. Cuando me pongo un vestido, puedo decidir qué es una tontería.'

Voy a empezar comentando la trama de «El príncipe y la modista». Es un relato que cuenta la historia de un príncipe junto a su modista y la gran cantidad de aventuras que viven. Es una novela gráfica de corte romántico en la que no puedo decir cuál es la voz predominante a la hora de narrar porque, como bien sabéis, nos encontramos con bocadillos. La trama no tiene ningún giro sorprendente si vemos la portada con detalle, pero igualmente me ha gustado muchísimo y la he disfrutado de un bocado. Son varios los valores que se reflejan en la novela, pero creo que hay uno fundamental que a día de hoy es muy sonado, pero poco recordado: Hagas lo que hagas, te van a criticar, así que haz lo que te de la gana. «Destellos», por otro lado, es una novela mucho más emotiva, que versa sobre la amistad de dos niñas y sus andaduras como vecinas después de que una de ellas acoja a la familia de la otra porque no tiene mucho dinero para vivir. Esta novela, sin embargo, sí que tiene un gran plot twist al final que a mí, personalmente, me gustó y me disgustó a partes iguales porque no te deja un muy buen sabor de boca al principio.

Prosigo la reseña hablando de los personajes puesto que, a pesar de que no hay demasiados en ninguna de las dos novelas, son muy variados. Podemos encontrar de todo en ellas, y eso me ha gustado porque, al fin y al cabo, todos pueden llegar a sentirse identificados con alguna de las caricaturas. Los principales de ambas novelas están muy bien definidos y podemos llegar a conocerlos a la perfección a los cuatro. Las dos parejas forman un tándem perfecto, aportándole al otro todo lo que le falta. No he encontrado antagonistas en la novela, cosa que me ha gustado mucho, porque son libros que, principalmente, están dirigidas a los niños y, aunque en la vida real siempre hay un antagonista, no es necesario que lo haya también en esos libros que utilizan para evadirse. En cuanto a la apariencia física, es bastante fácil imaginarlo, evidentemente, porque están dibujados. Pero de aquí lo que quiero destacar es la gran calidad de las caricaturas. Son todas preciosas y la ilustradora ha sabido mantenerse en la línea de los personajes que estaba dibujando. 

En lo referente a la estructura de las novelas, son muy ágiles y se leen muy rápido. Ambas están divididas por capítulos muy cortitos, porque las novelas tienen poco texto en comparación con la cantidad de imágenes. Que sean autoconclusivos es un punto a favor porque es ideal para aquellos que no conocen el género y quieren entrar poco a poco en él o para los que no tienen mucho tiempo. De lo que sí me he dado cuenta es que las novelas gráficas son más rápidas en comparación con las novelas tradicionales, pero entiendo que sean así porque son menos páginas en las que se desarrolla y, además, conlleva un gran trabajo la creación de los personajes. El final de ambas novelas han llegado cuando tenían que hacerlo y no creo ni que hayan sido precipitadas ni que se hayan dilatado mucho para conseguir más páginas. Como he adelantado, hay muchas páginas que solamente tienen ilustración, cosa que a mucha gente puede frenarle o echarle para atrás porque es poco texto el que termina leyendo, pero en una novela así, las imágenes es el único sustento de la novela. Mientras que en un libro común, lo más importante es la narración y la descripción de los personajes, aquí no dejan de ser los personajes y los dibujos que pueden crear.

'Pero podemos aprender de la forma en que lastimamos a los que amamos y tratar de hacerlo mejor'.

No había leído a Jen Wang con anterioridad, por lo que no conocía pluma de la autora. Este año me he propuesto leer más autoras con origen asiático, porque no soy propensa a hacerlo por puro desconocimiento. Esa autora ha sido un completo descubrimiento porque he visto gran ternura en las palabras que transmite. Ambas novelas me han llegado mucho, aunque una no se haya convertido en mi mejor lectura del año, y la otra sí, creo que son dos libros con muchos valores que harán reflexionar a niños, y no tan niños, en determinadas circunstancias de su vida.

En conclusión, han sido dos novelas que me han gustado muchísimo y que me han dejado con un buen sabor de boca. Unos libros ideales para todos aquellos que quieran desconectar o leer alguna novela gráfica si nunca lo han hecho. Ternura, amor, valentía, fuerza y amistad son los valores más bonitos que me llevo de la pluma de Jen Wang.