El fuego en el que ardo.

Autor: Mike Lightwood.

Editorial: Plataforma Neo.
Paginas: 384.
Precio: 16.90€
Idioma original: Español.

Ser gay puede complicarte mucho la vida.
¿Todas esas películas y series que te cuentan lo maravilloso que es ser gay? ¿Estar rodeado de compañeros modernos en el instituto que te quieren como eres? ¿Padres que te apoyan incondicionalmente?
Todo mentira. La realidad no es esa. Al menos, no la del protagonista de esta historia, que vive un auténtico infierno por culpa de aquellos que no lo aceptan como es.
Pero, cuando las cosas se complican de verdad, conoce a un chico de ciudad con una visión del mundo completamente distinta. Con su ayuda, deberá escoger entre dejarse consumir por las llamas de quienes lo odian o renacer de sus propias cenizas.

 

La verdad es que llevo siguiendo a Mike desde hace mucho tiempo por lo que he ido sabiendo bastante bien el recorrido del libro. Estando por twitter, vi un tweet de Mike y dije mira; El fuego en el que ardo va a ser mi última lectura del año y eso lo decidí el día 31 a las once de la mañana, así que me puse manos a la obra.

Me he encontrado con una novela fantástica. Me ha encantado la historia de Óscar, nuestro protagonista. Una historia real, llevadera y por supuesto entrañable. No he leído mucha temática LGTB por lo que tampoco puedo comparar con otras. Este género lo he descubierto durante este año y mi única lectura de este tipo fue El chico de las estrellas.

Mike ha conseguido llegar a mi interior con esta novela pues el sufrimiento por el que pasa Óscar es real. Me ha llegado dentro de una manera sencilla ya que la manera que tiene de escribir este hombre es sensacional. Es de una manera muy directa y coloquial, con un vocabulario ameno y bastante cotidiano.

En cuanto a su estructura, el libro tiene unos capítulos muy agradables ya que no son demasiado extensos. Podría decir que es un punto muy a favor aunque no puedo dar muchos detalles puesto que leí la novela en su versión digital y puede que no coincidan el número de páginas. Otro punto que es bastante a favor para esta novela es la introducción de Whatsapps y entradas a blogger. Hace que te introduzcas aun mas dentro de la historia, puesto que se crea un vínculo bastante bonito y amistoso. 

Esto, tengo que decirlo por que si no, creo que voy a reventar. ¡Los mensajes no tienen faltas de ortografía que te hagan sangrar los ojos! La última novela que leí con mensajes de Whatsapp creo recordar que fue Besos entre líneas y la verdad que, cuando no había faltas de ortografía había un conjunto de letras sin sentido. Esto no ocurre en este libro. Los mensajes son de lo más normales. Tienen sus abreviaciones y tal, pero son mensajes que podríamos mandar cualquiera de nosotros. 

Como punto negativo, que puedo decir algo que es lo que menos me ha gustado, fue un poco la idea cliché de que siempre una persona gay tiene que pasarlo mal. Al principio del libro no podía soportar esa idea porque a pesar de que no he leído mucho sobre este género, ya presiento que la idea de que el chico gay lo pase mal por el simple hecho de ser homosexual es topicazo increíble, me explico, topicazo dentro de una novela no en la vida real. Sé que en la vida real hay gente así de tonta. Pero... ¿Leeré alguna novela de temática LGTB en la cual el chico sea feliz? Quiero decir, pienso que en mi país y nuestra sociedad la homosexualidad, a pesar de que cada día la gente lo va comprendiendo mejor, está mal vista, sobre todo por personas mayores que han vivido y sobrellevado otro tipo de pensamientos pero, ¿Acaso no hay personas homosexuales que son la mar de felices y aceptados por su familia y compañeros?

Vale, a pesar de que me topé con un 'cliché' me gustó que mas tarde mejorara mi opinión sobre ello y ¿Cuándo mejoró? Cuando Sergio y la ciudad entraron en primer plano. 

Por suerte o por desgracia he vivido tanto en pueblo como en ciudad por lo que soy muy consciente de como se corren los rumores en un pueblo y de como pueden llegar a ser las personas de mente un poco más cerradas. En el momento que la ciudad entra dentro del libro, Óscar es tratado como lo que es, una persona normal y corriente y no como un monstruo por el hecho ser homosexual.

Como conclusión, es un libro muy ameno y ligero que puedes leer en poco tiempo ya que, como yo he dicho al principio, lo he leído en menos de un día. De hecho, podéis llamarme ahora loca, mientras que mi familia estaba cenando yo estaba leyendo porque me había empecinado en que mi última lectura de 2016 fuera esta y lo he conseguido. Un libro entrañable, lleno de amor, de amistad, de sufrimiento y de un tema que hoy en día está tratado con miedo, como si de algo malo se tratase. La homosexualidad.