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Los padres de Ava son dos intelectuales neohippies. La novia de Ava es una hípster sofisticada -y asfixiantemente posesiva- que jamás regresa a un local si comienza a ponerse de moda. ¿Y Ava? En secreto, Ava sueña con ponerse un jersey rosa, alternar con las chicas más populares y convertirse en la estrella del musical de su colegio. Y tal vez, por qué no, probar a salir con chicos. Pero el rechazo fulminante en el casting la obliga a alternar con un grupo que pone a prueba su afán de normalidad: los técnicos de escenarios. Pink es una comedia exquisita sobre la aceptación personal, el disfrute culpable de la cultura de masas y encontrar una familia donde menos te la esperas.
Muchas gracias a Kakao Books por el ejemplar.
No conocí a Lili Wilkinson hasta que recibí la nota de prensa de la editorial anunciando la publicación de este libro. Me llamó tanto la atención la portada y la sinopsis, que pedí que me tuvieran en cuanta para los envíos de los ejemplares en promoción y he tenido la suerte de que hayan contado conmigo.
'Este episodio de mi vida te lo traen las letras W, T y F. No lo entiendo'.
Prosigo la reseña hablando de los personajes, que tampoco han sido un punto fuerte en la novela. Tienen actitudes infantiles que no he llegado a comprender y unas decisiones totalmente desacertadas. Ya sé que los personajes son personas y pueden errar, pero si me describes durante todo el libro que la persona es de una manera de ser, no pega que tome unas decisiones completamente contrarias.
No conocía pluma de la autora, y tengo sentimientos encontrados. Por un lado, creo que usa un lenguaje juvenil y coloquial perfecto para el público al que va dirigido, pero demasiado descriptivo en muchas ocasiones. Esto me ha hecho que el ritmo de lectura sea bastante más lento y que no consiguiese engancharme al libro.
En conclusión, «Pink» ha sido una decepción que me llevo este año, pero que no por ello tiene que serlo para vosotros. Me quedo con la esencia principal del libro aunque, en mi opinión, no se haya llevado de la mejor de las maneras. Si estáis buscando un libro LGTBI que rompa esquemas, sin duda sí tienes que darle una oportunidad.
Clara Evans queda horrorizada cuando descubre la lista negra de «libros prohibidos» propuesta por el director de la Academia Lupton. Las novelas icónicas que figuran en ella han sido retirados de la biblioteca y no están permitidas dentro de las instalaciones del instituto. Y a cualquier estudiante que atrapen con alguno de estos libros deberá enfrentar un severo castigo. Muchas de estas historias han cambiado la vida de Clara, es por eso que no piensa quedarse de brazos cruzados viendo cómo el director abusa de su poder, y decide tomar medidas. Dentro de su taquilla, Clara comienza una biblioteca clandestina, y hace transacciones con libros como ¡Habla! o La guerra del chocolate. Pero cuando uno de sus libros más preciados queda unido a una tragedia inesperada, se ve obligada a asumir su papel en toda esa situación. ¿Será capaz de hacer las paces con sus sentimientos en conflicto, o luchar por esta causa noble será demasiado difícil de soportar para ella?
No sabía de la existencia de Dave Connis, hasta que vi este libro por todos lados cuando salió publicado. He de admitir que, aunque la portada me llamaba la atención, no me terminaba de gustar. No me animé a leerlo hasta que lo encontré en un grupo de intercambio y decidí darle una oportunidad.
'Los libros son una luz. Una luz que derrite la ignorancia y el odio'.
Prosigo la reseña hablando de los personajes, aunque no son muchos. La protagonista, como ya he dicho, es Clara. Un personaje muy bien construido, completamente redondo y que llegamos a conocer a la perfección. Los secundarios han sido los justos y considero que también están muy bien trabajados.
No conocía pluma del autor, pero me ha gustado mucho. Me he topado con un estilo juvenil, bien cuidado y descriptivo, aunque no en demasía. El ritmo entre narración y diálogo es más o menos equitativo, aunque creo que de narración hay algo más. Sin embargo, vuelvo a decir, que el ritmo de lectura no es para nada lento.
En conclusión, «La biblioteca prohibida» no es más que una novela con una enseñanza muy clara. No podemos liderar batallas con el pleno convencimiento de que estamos haciendo el bien, porque cada moral es cambiante e independiente y no todos tiene la misma percepción sobre lo bueno.
