¡Nos tomamos un té con Lorena Franco! | Entrevista.

¡Hola, erizos! Hoy vengo con una entrevista muy, pero que muy deseada y ansiada. No os he hablado nunca de ella, porque tengo muchas reseñas atrasadas, pero los que me seguís por instagram sabréis que me encanta esta autora. La descubrí hace mucho tiempo, pero no me he animado con ella hasta el odioso confinamiento. Para mí ha sido un inmenso placer poder hacerle estas preguntas a la escritora barcelonesa y es una de las entrevistas más especiales del blog. ¡Vamos allá!

1. ¿Cómo es el proceso de creación de una novela? ¿Sigues algún tipo de plan o vas a la deriva delante del ordenador?

Varía según el momento, ningún proceso es igual. Me considero autora de brújula, lo que podría decirse que voy un poco a la deriva cuando me planto frente al ordenador, pero la trama y los personajes ya están muy claros en mi cabeza. Eso me permite que, al final, puede que nada ocurra como había planteado desde el principio, y eso está bien, es como la vida misma, cuando planeas algo al milímetro, al final no sale tal cual. Dejo que la propia historia me sorprenda y, si eso me pasa a mí, considero que también puede ocurrirle al lector.

2. De todas las historias que tienes, ¿cuál es la que te ha supuesto un sobresfuerzo o te ha costado más tiempo escribir y por qué?

“Perdida en el tiempo” tuvo el proceso más largo (y divertido). Para mí es una de mis novelas más especiales. Hablamos de una novela de viajes en el tiempo a varias voces con más de 500 páginas, en la que no podía fallar nada. Afortunadamente, mereció la pena, porque la respuesta de los lectores ha sido y es maravillosa. 

3. Bien es sabido que tienes novelas tanto románticas como thrillers, ¿en cuál te sientes más cómoda? ¿Qué te hizo escribir un género y otro?

En todos los géneros en los que he trabajado me he sentido cómoda y los he disfrutado por igual. Los viajes en el tiempo me fascinan y, ojalá, vuelva a trabajar en una historia con esta temática, pero ahora mismo me decanto más por el thriller, porque me permite desarrollar varios géneros en uno. También hay romanticismo, no le voy a negar al misterio una historia de amor (surge de manera espontánea). Lo que te hace trabajar en un género u otro es el momento en el que te encuentres, y ahora mismo me divierto mucho con el thriller, le saco el mayor jugo posible a cada historia y, sobre todo, a sus personajes, normalmente personas como tú y como yo que se ven envueltas en una desaparición, un crimen… Me pregunto qué haría yo en su lugar, si podría dormir por las noches, si arriesgaría tanto… es el hecho de hacerme tantas preguntas, tanto a nivel personal como a nivel social, lo que me atrae del thriller y me motiva a desarrollarlo.

4. Son muchos los libros de tu autoría que ya he leído, pero... ¿Qué te inspiró a crear «El último verano de Silvia Blanch»?

Las desapariciones que en la actualidad se cuentan por millares en todo el mundo. Personas que se esfuman y de las que, pese a las teorías, no se vuelve a saber nada. Toda desaparición tiene una explicación y, en el caso de “El último verano de Silvia Blanch”, la hay, pero en realidad me inspiré en la desaparición no resuelta de una joven en EE.UU. Han pasado veinte años y no se ha vuelto a saber nada de ella. Su coche, como el de Silvia Blanch, apareció en una carretera forestal, pero de la joven ni rastro. Partiendo de esta premisa, quería una ambientación de montaña y elegí Montseny. Imaginé a una periodista “inocente”, un personaje alejado del thriller sin secretos ni sombras (para eso ya tenemos a otros personajes), y surgió Alex. De ahí, sospechosos cercanos a la desaparecida y dos palabras claves que me sirvieron de mucho para desarrollar la trama: «Todos mienten».

5. ¿Tienes algún proceso o ritual a la hora de ponerte a escribir? ¿Sigues alguna rutina especial o simplemente escribes cuanto te apetece?

Intento escribir cada día, algo que, con cuatro hijos, es bastante complicado, pero para eso están las noches. Hay que escribir cuando te apetece y te sientes motivado, sino, puedes ver cómo pasan las horas frente a una página en Word en blanco, te frustras y no conviene. Mi manera de trabajar no tiene una rutina estricta o marcada, no me es posible a nivel personal, pero aprovecho “los ratitos” y, cuando la historia fluye bien, son muy fructíferos.

6. Seguro que a lo largo de tu carrera literaria te han sucedido muchas cosas, ¿recuerdas algo con especial cariño? ¿Tienes alguna anécdota en especial que nos saque una sonrisa? 

Lo más especial que me ha pasado fue recibir el mensaje de una lectora vía Instagram, contándome que “La viajera del tiempo” la había ayudado mucho en sus sesiones de quimioterapia. No te puedes hacer una idea de lo que ese mensaje significó para mí. Luego hay momentos, días que te regala este mundillo y que los llevas siempre contigo. Recuerdo con mucho cariño mi primera Feria del Libro de Madrid de 2017, que fue el año en el que publiqué “Ella lo sabe” (Ediciones B) y festivales de novela negra como por ejemplo “Las casas ahorcadas” de Cuenca, donde me lo pasé fenomenal y conocí en persona a autores a los que admiro. La promoción de “El último verano de Silvia Blanch” fue también muy intensa y muy motivadora.

7. De todas las novelas que tienes publicadas, ¿cuál es la más especial para ti y por qué? ¿También tienes algún personaje favorito?

Tengo dos viajes en el tiempo muy especiales: “Perdida en el tiempo” y “El club de medianoche”. Hay que leerlos para saber por qué. Y mi personaje favorito hasta el momento es, además de Nora (“Perdida en el tiempo”), Alex, la periodista de “El último verano de Silvia Blanch”, porque, como siempre digo, me recuerda mucho a mí hace diez años y yo siempre he sido de las que he alejado a los personajes de mi personalidad y de las personas que conozco. Pero Alex me ha enseñado que, cuanto más pongas de ti a tus personajes, mejor fluyen en la trama que hayas ideado para ellos.

8. Si te dieran el poder de volver a escribir algunas de tus novelas, ¿cuál sería en el caso de que te decidieses por ello?

Las seis primeras, seguramente. Reescribiría todas mis primeras novelas, porque es igual a eso que solemos decir de: «Ay, si volviera a los 20 sabiendo todo lo que sé ahora…». Lo mismo pasa con esto. Pero hay que respetar el calendario, respetar a tu «yo» del pasado y entender que todo el camino recorrido ha sido un aprendizaje y que, en el momento, era lo que te apetecía y querías contar. Afortunadamente, he tenido el apoyo y el entusiasmo de muchísimos lectores y esas historias han calado como siempre he pretendido.

9. ¿Estás trabajando en algún proyecto actualmente del que puedas contarnos algo?

Actualmente estoy terminando las correcciones de dos novelas que, si todo va bien, verán la luz el año que viene con editorial Planeta. Son dos thrillers que he disfrutado muchísimo y que ojalá, cuando lleguen a vuestras manos, los disfrutéis tanto como yo. Y hasta aquí puedo leer.

10. Has pasado de ser una escritora autopublicada a una superventas en Amazon. Si tuvieras que darle un consejo a alguien que acaba de empezar, ¿cuál sería?

Con entusiasmo, mucho trabajo y constancia, paciencia e ilusión, llegarás a donde quieras llegar, siempre y cuando disfrutes del camino sin ponerte demasiadas metas. Porque las metas nos agobian, nos meten presión, y el camino de escribir y publicar de la forma que elijas, tiene que ser divertido, emotivo y apasionante. 

Hasta aquí ha llegado la entrevista de hoy. Como ya le he comentado a la autora, creo que ha sido la entrevista más complicada que he realizado hasta el momento. Tenía tantas preguntas que hacerle, que ha sido casi misión imposible elegir estas diez. Desde aquí, quiero darle las gracias de nuevo a Lorena. Te admiro, como escritora y como persona; yo de mayor quiero ser como tú.