El baile de las locas.

Victoria Mas | Salamandra Narrativa | 240 págs | 18.00€ | Autoconclusivo | Francés | Comprar aquí

Un homenaje al valor de las mujeres.

Estamos en París en marzo de 1885. Como cada año para la Media Cuaresma, se celebra el popular «baile de las locas» en el hospital de la Salpêtrière, dirigido por el eminente neurólogo profesor Charcot. Durante una noche, la flor y nata de París disfruta al ritmo de valses y polcas en compañía de las internas, disfrazadas con extravagantes atuendos. Entre las pacientes destacan Louise, una joven epiléptica maltratada por su tío que tiene puestas todas sus ilusiones en un futuro matrimonio con un interno del centro, y la rebelde y visionaria Eugénie, una muchacha de buena familia encerrada sin contemplaciones por su propio padre. Bajo la atenta vigilancia de la implacable supervisora Geneviève, ambas intentarán cumplir sus sueños y harán todo lo posible por escapar.

Conocí a Victoria Mas en una de esas vueltas interminables que siempre damos por las librerías. La portada me llamó la atención porque me parecía diferente y original y no dudé en darle la vuelta para leer la sinopsis. Enseguida supe que era un libro que me iba a gustar, por eso, cuando mi madre me sorprendió con él por Navidad me dio una de las mayores alegrías. 

'Una cárcel para mujeres con opinión propia'.

Voy a empezar comentando la trama de la novela. Esta vez, nos iremos de viaje hasta París, tenemos muchísimos datos de ambientación, un trabajo digno de admirar teniendo en cuenta que todo sucede en 1885 y las cosas no son ni suceden de la misma manera que ahora. La narración es en tercera persona, por lo que conoceremos el punto de vista de los tres personajes principales. Es una novela casi coral, pues no hay un protagonista como tal, pero he sentido más cerca a unos que a otros. No tendremos muchos giros literarios y el ritmo de lectura es bastante lento, lo que hace que, al principio, puedas tener ganas de abandonar, aunque no ha sido mi caso. La novela, en general, es bastante plana y es cierto que apenas suceden cosas, pero te deja con un buen sabor de boca y un mensaje necesario.

Prosigo la reseña hablando de los personajes puesto que me han gustado bastante. Creo que están bien construidos, y eso es algo complicado, teniendo en cuenta que casi todos ellos tienen una serie de problemas psicológicos difíciles de tratar desde el tacto y el cariño. Sin duda alguna, Victoria lo ha conseguido y, aunque haya una fina línea entre el acierto y el error, ha sabido muy bien donde está para no caer en lo políticamente incorrecto. Como he dicho, no hay un personaje principal como tal, pero sí que hay bastantes secundarios importantes en la trama que, si bien no tienen el mismo trabajo que los principales, también considero que son redondos.

En lo referente a la estructura de la novela, contamos con doce capítulos a lo largo de sus doscientas cuarenta páginas, por lo que cada división cuenta con, aproximadamente, veinte páginas. Teniendo en cuenta que el ritmo de lectura, como ya he dicho, es algo lento, pues se hace una lectura un poco tediosa, a pesar del número de páginas. Un libro que podría leerse de una sentada, se transforma en una lectura que, perfectamente, puede durar, como mínimo, una semana. 

'Los sueños son peligrosos, Louise. Sobre todo cuando dependen de alguien'.

Al ser lo primero que leía de ella, era evidente que desconocía la pluma de la autora. Admito que, a pesar de que el ritmo no es ágil y que hay mucha más narración que diálogo, me ha gustado mucho. Tal vez ha sido el tacto con el que ha tratado todo, pues no he sentido en ningún momento que el mensaje fuese forzado o que hubiesen escenas fuera de tono. Es algo que valoro mucho, porque considero que es una trama bastante complicada; no solamente nos enfrentamos con personas enfermas, sino también con otras tantas que banalizan con ellas. Aunque la ambientación es en el siglo XIX, el lenguaje es bastante asequible, directo y sencillo, por lo que no encontraremos parrafadas inmensas con palabras inentendibles ni estructuras complejas.

En conclusión, «El baile de las locas», ha sido una novela bastante emotiva con un mensaje sencillo, pero necesario y bien hilado y explicado. Una historia un poco lenta, pero con unos personajes bien construidos y una ambientación bastante bien elaborada. Es ideal para momentos en los que necesitas algo más denso, con una trama algo más compleja de entender y con la que empatizar; no es una lectura fresca ni tampoco de descanso.