Jolene.

Rebeca Fernández Román | Autopublicado | 116 págs | 13.00€ | El destino de Jolene #1 | Español | Comprar aquí

Jolene es una joven que empieza la universidad lejos de su hogar por petición de sus padres. La universidad le resulta algo extraña, pues las personas que están internas como ella son de lo más peculiar. Su habitación es doble, algo que le causará varios dolores de cabeza, pues su compañero no es nada agradable. ¿Podrá llevarse bien con él? ¿Será capaz de enfrentarse a los peligros que acechan alrededor de la universidad? ¿Sabrá defenderse cuando descubra que la magia existe? Todo dependerá de las personas de las que se rodee. ¿Estáis preparados para descubrirlo todo sobre Jolene? Solo os daré un dato más: su habitación tiene el número 99. ¡Adelante!

Recuerdo que vi de pasada este libro de  Rebeca Fernández Román en las redes sociales de su amiga Raquel, pero no fue hasta que comencé a tener una relación con la autora cuando me interesó. El mundo de las letras te da regalos maravillosos, y uno de ellos ha sido poder tener una amistad con Rebeca. Desde aquí solo quiero decirte que gracias por aparecer en mi Twitter para llenarlo de amor e hilos bonitos, porque eres fantástica.

'Puede que los malos nunca cambien. Puede que los buenos pasen a ser los malos'.

Voy a empezar comentando la trama de la novela. No tendremos muchos datos de ambientación, pero es que todo el libro trascurre en una Universidad peculiar a la que obligan a ir a Jolene, la protagonista. Tenemos algún que otro giro argumental que, aunque sabes cómo se va a producir, no deja de sorprenderte, y me ha gustado mucho la manera en la que ha trascurrido. Nos encontraremos, también, con una narración en primera persona, con la voz de Jolene, aunque también habrá un capítulo narrado por otros personajes que te ayudan a comprender mejor lo que sucede en un momento determinado de la trama. Siempre digo que prefiero una doble narración para conocer mejor a los personajes, pero en este caso me ha ayudado a centrarme mucho más en Jolene. Todo el tema de la magia está bien llevado, aunque he necesitado un poco de más información para comprender a la protagonista, y sobre todo, sus sentimientos; creo que la información le viene toda de golpe y tanto ella como yo necesitábamos asimilarlo. Sin embargo, al tener dos entregas más, creo que esta servirá de introducción para todo lo que se avecina.

Prosigo la reseña hablando de los personajes puesto que todos ellos me han encantado. Son bastante juveniles y se expresan como tal. No quiero decir esto como un punto negativo; sino al revés. Rebeca ha sabido utilizar esta baza muy bien y no ha querido crear personas perfectas ni adelantadas a su edad haciendo uso de un lenguaje pesado y rocambolesco. Jolene está bastante bien trabajada, pero no debo olvidarme de que es el inicio de una trilogía, como ya he dicho, y notaré una evolución en la segunda y tercera parte más que en este primer tomo. Los secundarios también me han encantado y he podido empatizar con ellos rápidamente, aunque a algunos no los he entendido muy bien ni he comprendido parte de sus decisiones.

En lo referente a la estructura de la novela, tenemos diecisiete capítulos, más un epílogo que te deja con ganas de más. Cada división cuenta, según esto, con unas seis páginas aproximadamente. Son capítulos cortos, pero la historia también lo es. No he necesitado mucho más desarrollo en cuanto a la trama se refiere sino, como he dicho antes, a determinados aspectos y a los personajes. Creo que es un libro perfecto para todos aquellos que quieran entrar en la fantasía poco a poco, o a jóvenes que quieran leer algo diferente a lo que ya habían leído con anterioridad. El final se me hizo un poco apresurado, pero el principio tuvo una introducción magnífica. 

'Aquí nos enseñan a ser fríos como el hielo [...] porque el amor hacia los demás nos hace débiles'.

Como no había leído nada de ella, desconocía completamente su pluma. Debo decir que me ha gustado bastante. Tenemos un lenguaje bastante coloquial, familiar y cercano, sin grandes pretensiones y sin ser muy descriptivo. También es directo, Rebeca transmite lo que quiere transmitir, sin irse por las ramas, como ya he dicho antes. En esta ocasión, no tendremos escenas de alto voltaje, y yo lo he agradecido mucho, porque ya sabéis que no me gustan. Su explicación es sencilla: es un libro dedicado a niños, concretamente, la autora quería hacerle este regalo a sus primos, y por eso se centra muchísimo más en la magia. ¿Quiero decir con esto que no es para adultos? Ni mucho menos, yo lo he disfrutado de principio a fin y he amado a Jolene tanto que quiero saber algo más de ella en la segunda parte. Para ser una autora autopublicada, creo que todo el tema de la narración está muy trabajado y se nota el mimo que pone en sus letras.

En conclusión, «Jolene», ha sido una novela con la que he disfrutado bastante, convirtiéndose en una primera parte perfecta e introductoria para la segunda y tercera entrega. Sin duda alguna, le seguiré la pista a Rebeca, que ya cuenta con varios relatos si queréis conocer un poco su manera de escribir. Si quieres entrar en un mundo mágico donde nada es lo que parece y con una trama muy original, no dudes en leer esta novela.